Aquí Giordano habla de un lenguaje común, nombra
los nombres libremente, […] llama al pan pan, al vino vino, a la cabeza cabeza,
al pie pie, a otras partes por su
nombre propio, llama comer al comer, dormir al dormir, beber al beber […]
Mantiene milagros como milagros, prodigios y maravillas como prodigios y
maravillas, verdad como verdad, doctrina como doctrina, bondad y virtud como
bondad y virtud, imposturas como imposturas, decepciones como decepciones,
cuchillo y fuego como cuchillo y fuego, palabras y sueños como palabras y
sueños, paz como paz, amor como amor. Considera a los filósofos como filósofos,
a los pedantes como pedantes, a los monjes como monjes, a los ministros como
ministros, a los predicadores como predicadores, a los chupasangres como
chupasangres, a los tarambanas, saltimbanquis, charlatanes, frívolos,
pendencieros, actores y loros tal como se los llama, muestra lo que son:
trabajadores, benefactores, sabios y héroes como ellos mismos.
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